LACTANCIA MATERNA: FRECUENCIA Y DURACIÓN DE LAS TOMAS

  

Hay muchos mitos sobre la lactancia que se han ido forjando durante el siglo XX y que han hecho mucho daño a las generaciones actuales. Me gustaria ir poco a poco en estas entradas desmitificar todas estas "creencias" devastadoras...

Tenemos que tener en cuenta que tanto el número de tomas que el niño realiza al día, como el tiempo que invierte en cada una es muy variable y por tanto no hay que establecer reglas fijas. Hay que ofrecer el pecho “a demanda”. ¿No os parece terrorifico tener que despertar a un bebé que duerme plácidamente para que coma? ¿Cómo sobrevivió el hombre de Cromagnon sin reloj?

Por lo tanto, la frecuencia de las tomas debe regularse según la demanda del niño, de acuerdo a la necesidad que tiene de recibir alimento y de hidratarse. No hay que esperar que el niño llore para amamantarlo.  Como explica Carlos Gonzalez en el que para mí es el mejor tratado sobre lactancia materna "Un regalo para toda la vida" (que te recomiendo si aún no lo tienes), pueden pasar muchos minutos desde que el bebé tiene hambre hasta que  llora. Si está despierto y comienza a buscar de forma activa, llevándose las manos a la boca y moviendo la cabeza hacia los lados, está demandando comer.

En los primeros días, el vaciamiento gástrico se produce más o menos cada hora y media. A veces las madres identifican esto como que la leche materna no es suficiente y recurren a la artificial que mantiene satisfecho al niño por más tiempo porque se digiere más lentamente. Esto es un error enorme que conduce en muchas ocasiones al abandono de la lactancia.

Durante las primeras semanas, la mamá tendrá que amamantar frecuentemente o cuando los pechos estén demasiados llenos hasta que se adecue la producción a la demanda de leche. El lactante toma leche 10-12 veces al día, unas 8 como poco. A veces son más tomas pero muy cortas y otras veces son más espaciadas pero más largas. Lo que no es normal es que el bebé pase horas seguidas mamando, es entonces cuando debemos revisar la técnica de amamantamiento ya que seguramente se deberá a que la succión no es eficaz, porque la postura no es la adecuada.  Sí que es cierto que en ocasiones, se puede deber a un período de crecimiento más intenso, en el que se debe ajustar la producción de leche para satisfacer requerimientos energéticos; esta situación dura aproximadamente una semana.

El tiempo que se necesita para completar una toma es diferente para cada bebé y cada madre y también varía según la edad del bebé y de una toma a otra. Al principio las tomas serán frecuentes y más prolongadas.

Habitualmente cuando el bebé 3está saciado los sonidos de deglución cesan, apareciendo la succión no nutritiva, los brazos y piernas los relaja, quedandose ligeramente adormilado y soltando finalmente el pezón.

Al dejar de succionar, se favorece que se llenen de nuevo de leche los senos lactíferos para las siguientes tomas.

En cada toma el bebé recibe los dos tipos de leche: la leche inicial (con más contenido de lactosa y agua) y la leche final (con más contenido de grasa y mayor concentración). Si el bebé no mama hasta el final de un pecho pierde la parte final de la toma que es la más rica en grasas y supone la mayor parte del aporte calórico , siendo  responsable de la sensación de saciedad.

Cuando la lactancia está correctamente establecida suele ser suficiente mamando sólo de un pecho en cada toma.

Lo importante no es que el bebé mame de los dos pechos sino que se vacíe completa y alternativamente cada uno de ellos, para evitar que el acumulo de leche pueda ocasionar el desarrollo de una mastitis y para que el cuerpo de la madre acople la producción de leche a las necesidades de su hijo. Por ello se recomienda permitir al bebé terminar con un pecho antes de ofrecer el otro. 

¡No dudeis en contactar conmigo si necesitais ayuda, os surgen dudas o si os apetece contar vuestras experiencias!