jueves, 17 de marzo de 2011

EL MASAJE PERINEAL

El masaje perineal prenatal ayuda a reducir tanto el traumatismo perineal durante el parto como el dolor posterior.
La mayoría de las mujeres quiere dar a luz sin desgarros perineales, cortes ni suturas, porque los mismos a menudo causan dolor y malestar posterior y es posible que repercutan de forma negativa en el funcionamiento sexual. Se recomienda el masaje perineal durante los dos últimos meses del embarazo como una manera posible de permitirle al tejido perineal expandirse con mayor facilidad durante el parto.
La revisión de varios ensayos clínicos ha mostrado que el masaje perineal, realizado por la mujer embarazada o su pareja  (a partir de las 34 semanas), redujo la probabilidad de traumatismo perineal y necesidad de episiotomía y del dolor perineal a los tres meses postparto.
Contraindicado en personas que tengan infecciones vaginales de repetición o activas, lesiones vaginales, placenta previa, amenaza de parto prematuro o rotura prematura de membranas.

Material necesario:
- Espejo (opcional)
- Lubricante:
• Aceite de rosa mosqueta: rico en ácidos grasos esenciales, vitamina C. Actúa como regenerante y nutre, da firmeza y elasticidad a la piel.
• Aceite de almendras dulces: Suaviza y da elasticidad a la piel. Tiene vitamina B.
• Aceite de germen de trigo: Rico en vitamina E. Tiene propiedades conservantes y antioxidantes.
• Aceite de oliva: Rico en vitamina E, protege y tonifica la piel además de tener efecto antioxidante.
Método:
  1. Es conveniente lavarse las manos y a ser posible con las uñas cortas (de manera que no se dañen los tejidos).
  2. Colocarse en un lugar íntimo y cómodo: Puede ser sentada sobre la cama, en el wc, en la bañera…
  3. Visualizar el periné con un espejo, para familiarizarnos con nuestra anatomía.
  4. Poner lubricante abundante en los dedos y en la vagina.
  5. Se puede aplicar compresas calientes en el periné para ablandar los tejidos.
  6. Introducir los pulgares en la vagina como unos 3-4 cm, Si lo realiza tu pareja, en lugar de utilizar los pulgares, usará los dedos anular y corazón. Separa las piernas.
  1. Empuja la zona del periné hacia abajo, hacia el recto y hacia los lados de la vagina con un masaje firme pero con delicadeza, estirando la zona hasta que sienta una leve sensación de quemazón o escozor. Manten la presión forzada sobre la horquilla del periné con los dedos durante 2 minutos o hasta que moleste.
  1. Ahora coge esta zona entre el dedo pulgar y los dedos opuestos, y realiza un movimiento de vaivén. Este movimiento estira el tejido de la vagina, los músculos que la circundan y la piel del periné. Realiza este masaje durante 3-4 minutos.
  2. Coge la parte inferior de la vagina entre los dedos y estira. Esto ayuda a imaginar cómo será la sensación de la presión de la cabeza del bebé.       

Estos ejercicios se realizarán todos los días hasta 10 minutos, aunque tiene la misma efectividad realizándolo correctamente dos veces por semana. Al principio, al estar la zona perineal menos elástica, puede resultar molesto, así que los tiempos pueden ser progresivos si no se toleran,  aumentando poco a poco, por ejemplo, comenzar el primer día con los movimientos hacia los lados durante un par de minutos y si duele, descansad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me parece super interesante tu blog. Son esas cosas que no sabemos y que resultan de indudable interés para las futuras mamás.
Muchas gracias por escribir todo esto